Este año, a diferencia de los anteriores, y sobre todo del último de pasarla "solo" con mi sobrino Leo, se me permitió la posibilidad de estar acompañado por 16 jóvenes misioneros del grupo Kairoi.
No es hablar de una experiencia más, fue la hermosa experiencia de encuentro con Jesús Resucitado, haciéndose presente en mi vida. El Señor con su sublime gracia que no se deja ganar... Dándonos lo mejor de su vida divina. Llenándonos de su misericordia.
Ahora que comienzo mi trabajo de párroco en la Santa Teresa de Jesús, éstos jóvenes llenaron de risas la casa parroquial, de orden, de disciplina, de oración. Me dejaron una gran enseñanza de amistad, de apostar por la juventud, que renueva la Iglesia con esperanza. Me dieron la oportunidad de avivar el sueño de Dios en la "Llamada", para sentirme más útil que nunca. Me renovaron la enseñanza de que debemos morir al pasado y resucitar al "Kairós" de Dios en la Pascua.
Esta Semana Santa 2012, fue como la esperaba "Santa" Semana Santa. Sentirme realizado en el trabajo encomendado, y con ganas de más experiencias de Dios.
No fue coincidencia que a tanto desatino en algunos esfuerzos viene esta "coincidencia", que como decía Einstein, "La coincidencia es la manera en que Dios permanece anónimo" y quiso demostrarse en estas coincidencias de poder contar con la presencia de tan especiales invitados en mi casa. Que ahora es nuestra casa... Digo coincidencia, porque de seminarista, siempre había trabajado en equipo. Y estar solo en semana santa, no ha sido mi costumbre.
Esta Semana me he podido sentír resucitado de los dolores y penas de fin del 2011, un gran año para recordar, por los amores y "desamores", las fatigas y realizaciones, dejadas como memoria de lo posible. Esta Pascua de Resurrección me llenó los vacíos existenciales con fuerza de Dios, me dejó el sabor de la máxima realización de lo imposible que sólo Dios enseña en la Vida.
Gracias a Dios y a Kairoi he resucitado renovado en la fe y la esperanza. Mil bendiciones les derrame Dios. Se les quiere... Un hermano más.
1 comentario:
Definitivamente es renovar ese compromiso a quienes nos atrevimos a entregar nuestra vida a Dios,hoy definitivamente mi compromiso va enmarcado en la entrega total al servicio, a ser instrumento para que mis hermanos resuciten en un hombre nuevo, siempre les comente en mis intervenciones a estos jovenes valiente que se atrevieron a vivir esta experiencia y tener una vida nueva, por mi parte ha sido hasta ahora la Semana Santa mas hermosa de mi vida, un rollo de pelicula que nunca se acaba.Jovenes valuartes comprometidos con jesucristo,un inmenso Jardin de rosas que adornan nuestras vidas por siempre. Dios ilumine siempre nuestras Vidas y nos llene con su infinita gracia, Los quiero su Hermano Danny
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